La familia de Luis Fernando Payán, el joven que sufrió quemaduras por la explosión de un transformador de la Comisión Federal de Electricidad rechaza el ofrecimiento que una empresa aseguradora contratada por la paraestatal hace de 2 millones y medio para resarcir el daño, y costear los tratamientos médicos del estudiante que tendrá secuelas permanentes. Por si fuera poco, además de ser insuficiente la indemnización, les han pedido firmar un documento donde aceptarían dejar de lado cualquier acción legal, dejando sin responsabilidad a la CFE. Ante esto, buscarán por la vía penal y civil hacer que la empresa cumpla con su responsabilidad. Explicó Héctor Contreras Pérez representante legal de la familia.
“En principio esa cantidad es incorrecta, pero además resulta cruel e inhumano que les exijan a la familia que firme un acuerdo de desistimiento, cuando todavía no se tienen los resultados de las cirugías que se le van hacer al joven, y ya de antemano están pidiendo que se otorgue un perdón a la CFE, entonces es incongruente porque la paraestatal no se exime de la responsabilidad por contar con un seguro, porque esto solo cubre una parte, están asumiendo una actitud muy cómoda al pedirnos que peleemos con el seguro”, declaró el licenciado Conteras Pérez.
El abogado y la familia aseguran que la paraestatal incurrió en negligencia al no dar mantenimiento adecuado a los transformadores pero lo más importante es el tratamiento que el menor de 15 años requiere tras 5 operaciones por las lesiones sufridas y que han sido atendidas por el Hospital Shrinners.
