Rodrigo Cadet es el director concertador que estará al frente de la opereta El doctor Milagro, de Georges Bizet, en el Teatro de la Ciudad de Casa de la Cultura de Sonora.
Sus motivos y conclusiones en esta conversación:
–Toda obra que se decida dirigir tiene un objetivo, un argumento, ¿cuáles son tus objetivos en la dirección de esta ópera El doctor Milagro?
–Más que nada nuestro motivo es presentarles esta ópera que es de contenido muy agradable, que también está pensada para los niños, para acercar a públicos de distintas edades pero principalmente a niños y jóvenes; es una opereta del maravilloso compositor francés Georges Bizet. Esta es una historia muy amigable, una historia cómica que le gustará mucho al público, y que nos presenta un Bizet muy novel, de dieciocho años quien en una comisión para un concurso de operetas, que precisamente es una comisión de otro gran compositor, Jacques Offenbach, resulta ganador con este texto que habla de la historia de la hija del alcalde de Padua; la hija quiere casarse con el capitán Silvio, sin embargo el capitán al encontrarse con que el alcalde es una persona distinguida y un poco dura, se las ingenia para hacer una treta, engañarlo y conquistar la mano de su amada Loret. Es una obra cómica, simpática, tiene un número central que es un cuartero del omelet, en el cual el capitán Silvio se hace pasar por un gran sirviente, y al no tener grandes dotes para cocinar, hace un omelet que promete ser incomible. Es una historia sencilla que estoy seguro le encantará al público de Hermosillo.
–Cuando inicias un proyecto de dirección te impones retos, ¿cuáles serían los retos en esta obra?
–Siempre afrontar este tipo de música es un reto, pero antes que nada el reto es que la gente se lleve una impresión agradable, que salga contenta con esta historia: convencer a partir de la música de concierto, de la ópera, que hay otras posibles realidades y que con el arte se puede disfrutar mucho más la existencia.
–¿Cómo encuentras a la Orquesta Filarmónica de Sonora?
–La encuentro muy bien, es una agrupación que se ha consolidado. A partir de la dirección de Christian Gohmer encuentro un grupo disciplinado, trabajado, con toda la disposición de hacer un trabajo profundo, musical, estoy contento y creo que daremos un concierto maravilloso.
–¿Hay una admiración de tu parte hacia Bizet?
–En particular sí, Bizet es un compositor que realmente nos muestra un talento excepcional desde los diecisiete años en que compuso su Sinfonía No. 1, que es magistral; muestra a un joven de una madurez genial. Y esta obra casualmente la compone después de haber ganado el segundo Prix de Roma, que era en su momento el gran galardón que se daba a los compositores. Dentro de la historia de la música habían ganado este galardón grandes compositores, y Bizet compone una ópera después de su segundo galardón, y luego de eso decide componer esta opereta como una comisión de concurso, creo que Bizet lo que logra con sus óperas, que no son tantas, es una revolución de la forma y su contenido, y de la manera de hacer ópera sobre todo en la Francia de sus tiempos.
–Cuéntanos de la importancia de la música en tu vida.
–Desde chico estoy en la música, comencé con clases de piano, y ha sido una manera natural de vivir, de existir, para mí la música es una forma de vida en la cual se ha integrado tanto mi manera de ser que ya no me veo sin ser músico, creo que es un mecanismo muy efectivo para comunicarse con otros seres humanos, y creo que desde siempre en la historia se ha sabido que la música tiene un poder hasta cierto punto místico, siempre grandes gobernantes, grandes emprendedores porque saben que tiene un gran poder que es difícil de explicar, y es difícil explicar cuál es mi relación con la música, simplemente puedo decir que ya es parte de mí y que bueno, trato de ejercerla con el mayor rigor, la mayor disciplina para poder compartir este arte con otras personas, enseñarles otra forma de compartir emociones, reflexiones espirituales.
