Además de la ricura en sabores y olores de la tradicional cocina mexicana, los alumnos del segundo semestre de la Licenciatura en Ciencias Nutricionales echaron la casa por la ventana en la presentación de sus platillos durante la VIII Muestra Gastronómica.
El área de la ya tradicional muestra, en donde los estudiantes presentan los resultados de sus investigaciones y de lo aprendido en la materia “Introducción a las Ciencias Nutricionales II”, que imparten los académicos Mauro Valencia Juillerat y Luz del Carmen Hoyos Nuñez se sintió impregnada de México.
En el recorrido, los asistentes pudieron degustar desde un delicioso caldo de oso, representativo del estado de Chihuahua; hasta pasar por las costillas de cerdo en salsa negra, de Michoacán; una discada de Coahuila, las enchiladas potosinas, el tradicional mole oaxaqueño, el pozole blanco de Colima, el mole poblano, el mole verde de Michoacán, hasta los burros de machaca, de Nuevo León, y las gorditas sonorenses y carne asada de Sonora.
Sobre el evento, Mauro Valencia comentó que éste es un evento en el que cada año se presentan las comidas tradicionales de diferentes regiones del mundo, y en esta ocasión, tocó a la comida mexicana.
Dijo que es una actividad que conlleva mucho trabajo, tanto para los alumnos como para los docentes, pues, además de aprender cosas nuevas cada vez, los alumnos dedican mucho tiempo y esfuerzo para tener una buena presentación, tanto de los alimentos como de la vestimenta.
“En esta ocasión, le tocó a la comida mexicana y ha sido un éxito”, comentó al señalar que participan alrededor de 100 estudiantes en 23 equipos, y recordó que la VII edición fue dedicada a la cocina de los países africanos.
La profesora Luz del Carmen Hoyos Núñez explicó, por su parte, que cada equipo está integrado por no más de cinco personas, quienes, además de preparar el alimento, realizan una investigación sobre la combinación de los platillos y de sus usos y costumbres.
“Además de preparar el platillo típico, los alumnos deben hacer un estudio sociocultural sobre el platillo, saber cuándo se utiliza, desde cuándo, cuándo es típico en la región que se prepara; los estudiantes aprenden mucho sobre el lugar”, comentó.
La académica añadió que los estudiantes aprendieron mucho de los estados, su ubicación, grupos indígenas de la región y si el platillo es una combinación de productos españoles y nativos, entre muchos otros datos.
“Se vuelve muy interesante, porque además, siendo ellos alumnos de Nutrición, tienen que hacer una evaluación del platillo y decirnos qué nutrientes brinda, lo que se transforma en un ejercicio para ellos”, comentó.
Además, los equipos participan en un competencia interna en donde un jurado califica todos los puntos evaluables para designar tres primeros lugares de la Muestra Gastronómica Estudiantil.
