Tras externar en un programa de noticias en redes sociales que durante su vida como sacerdote había sostenido relaciones sexuales, el Padre Tomás Herrera Seco ocasionó una serie de reacciones dentro del gremio sacerdotal por haber puesto a la Iglesia de Hermosillo en medio del escándalo. En su participación el sacerdote de origen español incluso mostró un condón que sacó de su billetera para decir que lo portaba por si se ocupaba haciendo alusión que una canita al aire nunca debe ser negada pues se consideraba un padre «travieso»
Ante esto, el vocero de la Arquidiócesis en Hermosillo, el también sacerdote Luis Alonso Cobácame Rodeles escribió una fuerte misiva dirigida a su compañero episcopal donde le reclama su afán de protagonismo y el poner en vergüenza a la Iglesia Católica entre otros señalamientos que a lo largo del escrito pueden identificarse e interpretarse como una gran molestia por sus acciones y sobre todo por su connotación sobre la relación del Padre Tomás Herrera con jóvenes a lo largo de los años que sirvió en iglesias de la ciudad.
A continuación el escrito íntegro que escribió el Padre Luis Alonso Cobácame:
Padre Tomás Herrera:
Te saludo esperando que estés muy bien.
Mira, Tomás, quizá yo sea el menos digno para hablarte de frente, pero quiero decirte cuánta compasión siento por ti. La verdad es que apenas te conozco y siempre en base a groseras acusaciones sobre tu persona. Y claro que eso nunca me escandalizó, quizá por mi buena voluntad.
Lo que sí me indigna es la manera en que humillas a la Iglesia y a tus hermanos sacerdotes que, si bien no son perfectos, la mayoría nos esforzamos por ser santos, leales y coherentes con nuestro ministerio.
Dime, ¿quién te crees para hablar sandeces y poner tu opinión por encima de la enseñanza de la Iglesia? ¿En serio estás tan necesitado de atención? ¿O tu protagonismo te ciega a tal grado de presentarte como payaso urgido de aplausos?
Respóndeme: ¿Quién te dijo que la comunidad quiere saber quién eres y cuáles son tus gustos? ¿Acaso no es del evangelio de lo que debes hablar y no de ti mismo? ¿Que no te hiciste sacerdote para dar a conocer al Señor Jesús en vez de exhibir tu desgastada persona? Al menos a mí me interesa más conocer al Señor que tus banales y bien ensayadas opiniones para no pasar desapercibido.
Te lo repito: ¡Siento compasión por ti! Sólo un tipo como tú es capaz de jugar al valiente en público y frente a cámaras y micrófonos, cuando tu conciencia te reclama la falta de un auténtico amor a ti mismo, a la Iglesia y a Dios. Y te lo digo porque si alguien se siente amado, no busca ex profeso el placer ni se prepara por si sale una oportunidad de sexo casual ni actúa como niña sedienta de popularidad.
No lo negaré, cuando yo era adolescente te admiré mucho, y tú sabes bien porqué dejé de hacerlo; ojalá todos aquellos chicos pudieran decirlo como yo. Sin embargo, no te culpo, ahora sé que eres un tipo solitario y que no sabes amar y que llevas años pagando a muchachitos pobres para que alguien te diga que te quiere. De mi parte, y a estas alturas de mi vida, sólo te acepto como eres.
Finalmente, te pediré un favor: Al menos por ética profesional no lastimes a la Iglesia hablando estupideces. Por favor, no humilles a tus hermanos sacerdotes con tus pensamientos enfermizos; esos vívelos tú solo.
Y si lo que buscas es el protagonismo para ser un tipo famoso, ten la decencia de dejar de vivir de la Iglesia y del estatus que te da decir que eres un presbítero. No se te olvide que la Iglesia te forjó y te hizo quien eres. Y, en serio, si lo que tú llamas «reglamemtos de la Iglesia» te fastidian tanto, poque no haces más que quejarte de ellos, ¿qué haces en la Iglesia?…
¡Ah!, y de paso, no nos caería mal que exhibieras tus cédulas profesionales de tantos títulos qie dices tener, pues nadie las ha visto jamás… Al menos yo no te creo.
Tomás, te tengo en mis oraciones y espero que también tú reces por mí.
Pbro. Luis Alonso Cobácame Rodeles
