La capirotada es un postre lleno de simbolismo religioso que se ha convertido en un elemento esencial de la Cuaresma. Cada uno de sus ingredientes representa un elemento de la pasión de Cristo: el pan simboliza su cuerpo, la miel representa su sangre, los clavos son los que lo crucificaron y la canela representa la cruz en la que fue crucificado.
Pero a pesar de tener una base común, cada familia tiene su propia versión de la capirotada y es única, pues le agrega su toque personal. Aqui te compartimos una excelente version de este rico platillo de cuaresma.
Ingredientes:
- 8 rebanadas de pan de bolillo o de pan francés, cortado en rebanadas gruesas
- 4 tazas de agua
- 1 taza de piloncillo rallado (o sustituto de azúcar morena)
- 2 ramas de canela
- 1/2 taza de pasas
- 1/2 taza de cacahuetes pelado
- 1/2 taza de queso fresco desmenuzado
preparación:
- Precalienta el horno a 180 grados Celsius.
- Coloca las rebanadas de pan en una bandeja para hornear y tuesta en el horno hasta que estén doradas y crujientes.
- En una cacerola grande, agrega el agua, el piloncillo rallado y las ramas de canela y calienta a fuego medio-alto hasta que el piloncillo se disuelva completamente.
- Agrega las pasas y los cacahuetes a la cacerola y cocina a fuego medio durante unos 5 minutos.
- En un refractario para horno, coloca una capa de pan tostado. Cubre con una capa de la mezcla de piloncillo y luego agrega una capa de queso fresco. Repite este proceso hasta que hayas utilizado todo el pan y la mezcla de piloncillo.
- Cubre el refractario con papel aluminio y hornea por 15 minutos.
- Retira el papel aluminio y hornea por otros 10-15 minutos hasta que la capirotada esté dorada y burbujeante.
- Sirve caliente y disfruta tu deliciosa capirotada.