Alegra ver el teatro a plenitud. Las butacas cómplices del ensueño, el deseo de encontrar la emoción.
Felicita el curso de la Muestra Estatal de Teatro 2016. Aplauso siempre en reconocimiento a los padres de familia que ofrecen como opción a sus hijos el arte.
Anoche el Teatro de la Ciudad de Casa de la Cultura vivió la infancia perenne, con la propuesta de la obra clásica El Principito, en un trabajo teatral desde Saltimbanqui Teatro, la compañía que dirige Julio Patricio Cárdenas.
Volvimos los espectadores adultos, a ese páramo siempre febril que es la inocencia de la niñez. Todo a consecuencia de lo que ocurrió encima del escenario.
Cuán difícil se vuelve el reto de trasformar una de las obras clásicas de mayor prestigio en la literatura universal en una puesta en escena. Nomás leer el título y para los puristas de la crítica, el prejuicio se exacerba. ¿Cómo plantearán otra vez este magnánimo relato, los actores, el director?
Pues así, simple y llanamente, con la pasión y la honestidad, con el ingenio que dicta la búsqueda, con la trayectoria, el bagaje de un director de escena que decidió entregar su vida al teatro: Julio Patricio Cárdenas.
Tiene el atino, tanto en la selección del texto como en la propuesta de dirección y qué decir del reparto: parecería que los eligió con lupa, o que el casting lo supervisó durante muchos días, meses o años.
Anoche los espectadores, construyendo un rumor de satisfacción y sorpresa, volvimos a la filosofía lúdica de la historia escrita por Antoine de Saint-Exupéry.
Así como los actores se divierten encima del escenario, así los espectadores aprendimos de la literatura y su contenido, esa literatura narrada en cuerpos y voces, desde esa vuelta de tuerca que da el director con su planteamiento al convertir a los actores en juglares como una estrategia de esqueleto en el montaje.
Alegra ver la respuesta en el público, saber que hay demanda para observar la creación. Aplauso para Saltimbanqui Teatro que permanece en la búsqueda anteponiendo esta responsabilidad en la selección de temas, en la inclusión de un reparto por demás profesional.
Seguimos en la Muestra. Habemus teatro.