Inicio Buena Vida El cariño canino es la mejor medicina para aliviar el dolor

El cariño canino es la mejor medicina para aliviar el dolor

Su amor es incondicional, desinteresado, sin términos, límites y condiciones. Te apoya psicológicamente, te ofrece cariño, comprende tus sentimientos y sobre todo no te juzga por tus errores, ni por cómo eres, ni por quién eres socialmente. El perro no es solo un animal, es un amigo que recordaremos toda la vida.

Este amigo, y el cariño que te muestra, tiene un efecto verdaderamente curativo en el cuerpo humano. Esta es la afirmación de los investigadores de un estudio publicado en la revista PLOS One y que se refiere a los resultados de un ensayo clínico controlado del efecto del tratamiento con perros sobre el dolor de adultos en el Departamento de Emergencias.

Los perros pueden ayudarnos a aliviar el dolor

Lo que se ha encontrado es que solo 10 minutos con el terapeuta de cuatro patas pueden ayudar a aliviar el nivel de dolor.

En particular, durante un ensayo clínico en varios hospitales canadienses, se pidió a más de 200 pacientes de UCI que informaran su nivel de dolor en una escala del 1 al 10 (siendo 10 el nivel de dolor más alto).

Un grupo no recibió ninguna intervención para reducir su dolor, mientras que los participantes del otro grupo tuvieron 10 minutos con un perro de tratamiento. Luego, los pacientes calificaron sus niveles de dolor.

Se observó que aquellos que tenían tiempo con los perros de tratamiento reportaron menos dolor. Además de la intervención de los perros de tratamiento, se observaron cambios significativos en la ansiedad, depresión, así como en su bienestar general.

Los resultados muestran claramente lo que los terapeutas caninos han dicho durante mucho tiempo… que el afecto canino «cura» enfermedades como las enfermedades mentales, ya que brinda optimismo a los pacientes y mejora muchos otros síntomas físicos.

Hay investigaciones que muestran que las mascotas son una parte importante de nuestra salud de varias maneras. Nos motivan, nos despiertan, (nos dan) rutinas, fortalecen el vínculo humano-animal.

Los resultados de este estudio nos ayudan a dejar de preguntarnos si los perros de tratamiento son útiles en un contexto médico y comenzar a preguntarnos cómo ayudan y cómo integrarlos mejor con los grupos de atención médica.

 

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