Cada vez que llueve en Hermosillo, las calles de la colonia El Llano se inundan. Ante la falta de pavimento y drenaje pluvial los estancamientos son tan fuertes que es complicado circular por el lugar ya sea en carro y mucho menos a pie.
El riesgo para los vecinos aumenta porque el agua debe evaporarse y eso genera que en la temporada se llene de mosquitos, incrementando la proliferación del dengue.
Aún más grave es la situación en la escuela primaria «Enrique Quijada» ubicada en Calle Juan Diego y Calzada Tepeyac, pues precisamente enfrente del plantel se forma un enorme charco que no permite que los alumnos pueden cruzar la calle cuando el agua sube de nivel. Y si la lluvia cae cuando es hora de clases, el caos es mayor pues no pueden salir. Sin mencionar que se suspenden clases por dicha situación lo que ocasiona problemas para los padres de familia que trabajan.
Este martes comenzó la luvia desde las 11 de la mañana así que a la hora de salida los alumnos debieron ser «rescatados» por padres que llegaron en pick ups y auxiliaron a los demás que no podían acercarse por sus hijos. Algunas madres se descalzaron y en medio del agua recogieron a sus pequeños.
El problema además de ser una necesidad de infraestructura en las calles, se convierte en un problema de salud para los niños por el riesgo de dengue o enfermedades infecciosas por la acumulación del agua que tarda días en evaporarse y después queda lodo por las calles.
La responsabilidad directa es del Ayuntamiento de Hermosillo pues la pavimentación y el drenaje son trabajos que deben realizar más por que la escuela es un espacio público, sin embargo también las autoridades de salud y educación pudieran gestionar se realicen los trabajos antes de que se de una situación que afecte a los vecinos o a los propios alumnos.
Cabe señalar que el problema es añejo pues se ha denunciado hace más de 5 años y cada año es la misma situación con el estancamiento de agua.
