El modelo de participación ciudadana para combatir la inseguridad ha dado resultados positivos en un grupo de vecinos que optaron por organizarse para defender su espacio, proteger su patrimonio y además formar una comunidad que no depende de las acciones del gobierno en su totalidad.

Ubicados al sur poniente de la ciudad Oasis del Sol en sus distintas secciones son colonias relativamente nuevas, pero en particular una cerrada, Mojave, está rodeada de una zona considerada como insegura, terrenos baldíos que albergan malvivientes, paso de personas extrañas y otras colonias cuyos índices delictivos son para asustar a cualquiera.

Sin embargo los vecinos de esta cerrada decidieron que no serían víctimas, tampoco victimarios de los delincuentes. Entendieron que debían ser proactivos y es así como comenzaron a formar una comunidad participativa y preocupada por mantener lo que tanto les ha costado. Su hogar.

Ayudados en un principio por la constructora que les vendió las casas comenzaron a conocerse entre todos los vecinos, intercambio de datos. Conocer quien vive a un lado y tener la confianza de acudir a cualquiera de los habitantes del lugar. Después reuniones informales para convivir, integrarse y todo con una inversión menor de lo necesario para una pequeña fiesta, refrescos, café, algo de comida. Así empezaron a conocerse entre los vecinos.

Después un centro comunitario, un pequeño espacio donde reunirse ya de manera formal. Acondicionado para  que los vecinos pudieran convivir, bancas, juegos, cancha de futbol, aparatos para ejercicios y un local común para ser usado. La constructora lo otorgó y los vecinos se han encargado de mantenerlo, cuidarlo y engrandecerlo pues con ayuda de todos han logrado incluso formar una pequeña biblioteca para el club de lectura de todos los martes y jueves.

En este lugar no todo ha sido color de rosa pues al principio sufrieron robos, incluso han tenido la presencia de tiradores de droga sin embargo a la hora de tomar la decisión si dejar todo en manos de la policía o ante la falta de atención de la misma en algunas ocasiones tomar justicia por su propia cuenta, decidieron que era mejor reducir al máximo la posibilidad de que entraran en su entorno este tipo de delincuentes. Así que optaron por ser una comunidad de vecinos que se apoyaría en la autoridad para denunciar a quien intentara invadir su tranquilidad pero entre todos harían frente a los problemas.

Hoy, la cerrada de Mojave en Privadas del Sol es un lugar donde se advierte a quien quiera delinquir que está siendo vigilado, desde que uno entra los vecinos ya se han enterado de quien está en el lugar y con herramientas como los mensajes vía whatsapp se comunican entre ellos para denunciar algún peligro, esto ha permitido que muchos dejen sus pertenencias afuera de sus casas durante la noche y no pase nada, bicicletas, herramientas o asadores y no se los roben, que los juguetes de los niños se queden en el parque y nadie los tome. Permite que cualquiera que busque realizar una actividad fuera de su casa lo haga sin correr peligro, ya sea jugar, caminar o hacer ejercicio es un lugar que los vecinos han mantenido seguro con la voluntad de trabajar en equipo preocupados por su entorno.

Con este modelo de participación además se está formando una generación de niños y jóvenes que crecen viendo como la unidad de un grupo vecinal logra mejores beneficios en el entorno que si esperan que solo la autoridad trabaje para mantener el orden en la colonia pues a ellos les ha costado desde el mantenimiento del lugar hasta lograr que los robos hayan desaparecido, no existan pintas en las paredes y que incluso se pueda pagar entre todos un vigilante que mantenga la puerta de acceso con seguridad. La cultura de saber que hay que invertir recursos propios para lograr mejores resultados.

 

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