Este viernes más de 130 Bomberos renunciaron a su cargo. Hermosillo se quedó sin bomberos, al menos por unas horas. Aunque el servicio, es importante decirlo nunca se dejó de prestar. Su vocación y entrega no fue la moneda de cambio para ejercer presión.

Jesús Fierro regresaba apenas de vacaciones. Al estar en la base donde presta su servicios desde hace casi 10 años, un oficio entregado le informa que debe ir a Palacio Municipal. Ahí le notifican que ya no es parte del cuerpo de bomberos que tanto ama y al que ha entregado su vida.

Inmediatamente, compañeros, amigos, y sus comandantes realizan una protesta y renuncian de manera simbólica; Hermosillo tuvo gente que atendía las emergencias pero no tenía un cuerpo de bomberos al menos administrativamente.

Hoy también le llovió a Jesús

Jesús Fierro por fuera de la estación, con una sudadera gris trata de mantener la calma, apenas ha entregado su uniforme y su equipo. Habla del amor que le tiene al cuerpo de bomberos y sobre todo se le quiebra la voz cuando habla de que ahora no tiene trabajo y su hijo más pequeño acaba de cumplir años hace dos días.

Una marcha se lleva a cabo, en las calles la lluvia hace que el tráfico vaya más lento así que llama la atención de la gente el ver a los bomberos uniformados caminando en grupo, también en redes sociales la decisión de despedir a un bombero hace ruido en el plano digital.

Hubo una confusión

Una marcha a Palacio Municipal para buscar el diálogo que a decir de Juan Francisco Matty comandante de bomberos en la ciudad tuvo eco con las autoridades, explicó al salir de una reunión que había vuelta atrás y Jesús Fierro se reinstalaba en su puesto al igual que el resto de los compañeros.

Hermosillo tiene otra vez a su cuerpo de Bomberos. Ese que atendió el incendio de la Guardería ABC, los que apagaron el incendio de la Torre de Hermosillo, los que a diario rescatan gente prensada, bajan panales de abeja, revisan instalaciones de gas y sofocan las llamas en emergencias de la ciudad. Esos que donan sangre y que a veces no tienen sueldo a tiempo, que no tienen el equipo completo, que no reciben lo suficiente pero que ahí están siempre al pie del cañón. Dicen que se trató de una confusión administrativa.

También dicen que hubo represión por decir lo que no está bien.

 

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